Cada diciembre las mascotas se convierten en el regalo de Navidad soñado, pero tras días felices de juegos y fotos llega una realidad para la que muchos dueños no están preparados; lejos de ser un accesorio o un juguete, son nuevos miembros del hogar y claro, con su llegada ¡lo cambian todo!
Con los primeros días del año llegan las tareas diarias, el colegio, la rutina y es ahí donde la paciencia se agota y llega la dura realidad para muchas mascotas: el abandono.